Sentirás que el negocio funciona, que tienes tiempo para proyectar el futuro y pensar en nuevos productos/servicios.
Verás que negocio despega sin necesidad de demasiada inversión.
Te sentirás un verdadero profesional dedicando tiempo a tu clientela.
Tendrás seguridad en tus capacidades, sintiéndote fuerte, orgulloso de ti mismo y del cambio vivido.